- Abr 25, 2015
- Pedro Vargas
- Leche Materna, Maternidad, Noticias, Padres, Para Doctores
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(Medscape. News & Perspectives. Pediatrics. April 24, 2015)
La Agencia Europea de Medicinas (EMA) se ha unido a la restricción de medicinas que contienen codeína cuando se usen para la tos y los resfriados de los niños. El Grupo Coordinador (CMDh), específicamente ha señalado:
- el uso de codeína para la tos y el resfriado está ahora contraindicado en niños menores de 12 años
- el uso de codeína para la tos y el resfriado no está recomendado para niños ni adolescentes entre los 12-18 años que tienen problemas respiratorios
También ha dicho el CMDh que la codeína no debiera usarse en personas de cualquier edad con un metabolismo ultra rápido de la codeína ni en mujeres lactantes, ya que la codeína es nociva al bebé y se concentra en la leche materna.
La codeína se convierte en morfina en el cuerpo humano y en algunos individuos con ultra rápido metabolismo de ella se logran niveles de morfina en sangre muy altos, lo que puede inducir serios problemas respiratorios y depresión respiratoria.
Este proceso no es predecible y muy variable en niños menores de 12 años con lo que esta población está a riesgos particularmente significativos. Niños con problemas conocidos como apnea obstructiva, están más susceptibles a tener problemas agregados respiratorios con la codeína.
Esta decisión del CMDh apoya la decisión de otro organismo de la EMA, el PRAC (Pharmacovigilance Risk Assessment Committee) publicada un mes atrás. El PRAC recuerda que tanto la tos como los resfriados se limitan por si solos generalmente y que mejoran sin tratamiento. También señala que no hay evidencias suficientes de que la codeína es efectiva en el tratamiento de la tos en niños. Ya en junio del 2013, el PRAC había abogado por la restricción de la codeína en niños para suprimir el dolor, lo que también fue apoyado por el CMDh.
El FDA de los Estados Unidos (Food and Drug Administration) también ha advertido contra el uso de medicamentos para la tos y el resfriado en niños menores de 2 años, sin recetas y de las tablillas de las farmacias (over-the-counter).