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Los trastornos del sueño en el niño no se juzgan en razón de los inconvenientes que producen a los padres sino de su patrón esperado para su grado de madurez y relacionados con otras variantes que van desde alteraciones del patrón de la respiración hasta movimientos de las extremidades, trastornos del comportamiento, o aquellos relacionados con condiciones médicas o psiquiátricas. Enumerarlos aquí no es el propósito de esta nota.

 

  • Existe la contabilización promedio por edad del niño, del número de horas que debe dormir cada día. En el primer año de vida este promedio es de alrededor de 14 horas con siestas durante el día y la disminución paulatina de las horas de sueño durante el día, que pasa de unas 5 horas promedio en los primeros 3 meses a 2.5-3.5 horas de los últimos 6 meses al año
  • En las primeras 2-4 semanas de vida, el recién nacido cambia el ritmo que traía de su vida en el útero para estar más tiempo despierto y en horario de día, inverso a lo que traía de más tiempo despierto en el horario nocturno de los padres; pero todavía pasa más tiempo durmiendo que en vigilia
  • Es una creencia popular que si el niño no se le deja dormir en el día, dormirá más en la noche. Nop. Todo lo contrario
  • La madurez del sueño se ha alcanzado cuando el niño ya duerme 5 horas continuas después de la media noche y por 4 semanas, por lo menos. Esto no es forzado
  • El niño necesita establecer asociaciones con el inicio de la hora de dormir, de otra manera no se dormirá o será más difícil que acepte la hora de irse a la cama
  • Más de 30 minutos de rutinas para dormirlo puede indicar que los padres no han podido establecer límites
  • Los miedos a la hora de irse a dormir suelen aparecer en edades de la escolaridad inicial o preescolar

 

 

 

¿Qué hacer para que su niño duerma mejor o sea menos difícil ponerlo a dormir?

(tomado de AAP: Quick Reference Guide to Pediatric Care. Ed. Deepak M. Kamat. 2nd Edition, 2018)

 

Respuesta para Premio Nobel de la Paz

 

  1. Para revertir el reloj biológico: día-noche
    1. Establezca una hora de dormir
    2. Apague las luces o disminuya la intensidad
    3. En la comida última comparta menos
    4. Al amanecer use luces brillantes y socialice
  2. Asociación con la hora del sueño
    1. Ponga al niño en la cuna aunque todavía esté despierto, a partir de las 48 semanas de edad gestacional (2 meses si fue a término)
    2. Si no funcionó esto hay que iniciar un programa gradual
      1. Los padres deben saber qué esperar, asegurarles que no producirán daño y aprender a manejar el sentimiento de abandono que pueden tener los niños
      2. También deben entender que el éxito del manejo requiere consistencia y colaboración de quienes cuidan al niño durante la noche
    3. Para ocasiones de sentar límites
      1. Los horarios deben ser razonables. No se ponga límites que ni Ud. puede cumplir
      2. Asegure que cada padre tenga un tiempo especial e individual adecuado cada día
      3. Límites deben plantearse cuidadosamente
      4. Limite la rutina de la hora de dormir a un grupo definido de actividades y de tiempo
      5. Señálele al niño que la rutina no cambia y que no hay tal cosa como “solo una más” y cumpla con ello
      6. Escoja la hora de dormir que sea cuando el niño suele ya estar cansado, para que sea más fácil que se duerma
      7. Evite siestas cerca de la hora de dormir
      8. Refuerce positivamente
    4. Para miedos a la hora de dormir
      1. Reconozca que el niño tiene miedos
      2. Asegúrele a su niño que sus papás están con él para protegerlo
      3. Considere rituales para espantar lo que asusta al niño
      4. Participe al niño en la consecución de una lámpara de mano para usarla en el cuarto durante la noche
      5. Tranquilice al niño con la lectura de cuentos bonitos o de ejercicios relajantes
      6. Utilice una luz tenue de noche
    5. Para el insomnio primario
      1. Elimine factores de distracción o mejore las condiciones ambientales
      2. Puede tratar algún medicamento liviano como sería la difenilhidramina o Benadryl, clonidina, melatonina o el té de valeriana
    6. Para trastornos asociados al inicio del sueño
      1. Aumente el volumen de la leche que se le da a la hora de dormir. Algunos niños entre los 4-6 meses podrían iniciarse en alimento sólido para que estén más “llenos” a la hora de dormir
      2. Si se alimenta del pecho materno, aumente el tiempo de lactancia en la alimentación de la noche o aliméntele más frecuentemente

 

 

En otra ocasión podríamos discutir trastornos como el sonambulismo y otros trastornos

2 Comments

    • Salwa Reply

      25 octubre, 2017 at 1:43 am

      👍🏻👍🏻 Me encantan todos sus articulos Dr. Gracias!

      • Pedro Vargas Reply

        28 noviembre, 2017 at 5:12 pm

        Gracias por su contribución. Algunos son más densos que otro pero persigo educar a la luz de la evidencia probada.

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