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Una iglesia-empresa en los EU -Genesis II Church of Health and Healing-  de aparente vínculos y procedimientos religiosos, comercializa el dióxido de cloro como “Solución Mineral Milagrosa” para “curar, mitigar, tratar, prevenir o diagnosticar coronavirus y/o COVID-19 en las personas”, y advierte que sus protocolos son “protocolos sacramentales” de tal iglesia. Por el carácter altamente nocivo del dióxido de cloro, la Agencia de Alimentos y Drogas (FDA) le emite una carta de advertencia[1] sobre su fraudulenta promoción, sobre la violación al vender una nueva droga no aprobada para tal uso y otras violaciones delictivas, y le prohíbe inmediatamente su venta, porque ante la urgencia de salud creada por la pandemia, es prioritario proteger a los consumidores de ciertos productos que no tiene aprobación para tales usos promovidos, como le exige una respuesta en 48 horas para que describan los pasos tomados para cumplir con esta advertencia.

 

Para mí, esta decisión del FDA señala el grave y serio riesgo al que algunos exponen a mayorías de personas desinformadas y distraídas, o aterrorizadas con tanta incertidumbre frente a esta pandemia de un virus desconocido y altamente infeccioso.  Es, además, mejor argumento y anterior[2], que los créditos asumidos a “los miles de médicos alrededor del mundo que lo usan desde décadas atrás”, como muy pintorescamente me lo trata de enseñar, una lectora del twitter, la misma para quien la probada evidencia de su eficacia y seguridad radica en el hecho de que “ese producto tiene patente y está registrado” y, que remata su intervención con “¿cuál es su miedo”.

 

Hace rato tomé la decisión de no contestar todo y a todos porque el acumen de intervenciones en las redes no solo es improcedente sino cargado de necedades o sandeces.  Pero, antes de revisar algunos asuntos sobre el dióxido de cloro, que es el propósito de este escrito, solo recuerdo a las personas que no están muy relacionadas con patentes y registros, que ello no significa que se pueden utilizar, una vez registrados, para lo que no han sido registrados, o para lo que nos de la gana.  La patente es solo un certificado de propiedad comercial, en este caso. Y esto es todo lo que le dedicaré a esa persona que respondió a mi tweet, donde yo opinaba sobre la necesidad de sancionar promociones nocivas en el mercado de la salud y la higiene.

 

Sin deseos de repetir, sino por su necesidad, “no se ha demostrado que los productos de dióxido de cloro sean seguros y eficaces para ningún uso, incluyendo COVID-19, pero estos productos continúan estando a la venta como un remedio para tratar el autismo, cáncer, VIH/SIDA, hepatitis y la gripe, entre otras condiciones, a pesar de sus efectos nocivos”, señala el documento del FDA fechado 8 de abril de 2020.  Entre los efectos adversos graves y hasta mortales reportados al FDA, después de tomar un producto de dióxido de cloro, están:

 

  • Insuficiencia respiratoria
  • Alteraciones de la conducción eléctrica del corazón
  • Hipotensión severa mortal causada por deshidratación
  • Insuficiencia hepática aguda
  • Anemia hemolítica por destrucción de glóbulos rojos
  • Vómitos severos
  • Diarrea severa

 

El dióxido de cloro es una solución al 28% de clorito de sodio en agua destilada y se usa como blanqueador y descontaminante de superficies industriales.  Sencillo, es un desinfectante y no debe ingerirse frente al riesgo de daño severo, envenenamiento y muerte[3].  Esta advertencia no ha sido invisible[4], [5],[6].  En Latinoamérica, cuna de la desigualdad en la educación y con índices de inequidad altos, las drogas maravillosas también encuentran cunero cálido[7]. En Europa también se ha denunciado su falacia y su peligro[8].

 

No es necesario decir más nada.

 

[1] Warning Letter. Genesis 2 Church. MARCS-CMS 606459 – April 08, 2020. U.S. FOOD & DRUG ADMINISTRATION (FDA)

[2] FDA New Release: FDA warns consumers about the dangerous and potentially life threatening side effects of Miracle Mineral Solution. August 12, 2019

[3] Matias A. Loewy: Dióxido de cloro: enga˜õs y peligos del tratamiento para COVID-19 que nunca fue. Medscape. 6 de Agosto de 2020

[4] Noticias ONU. 4 de Agosto de 2020

[5] OPS: COVID-19 La OPS no recomienda tomar productos que contengan dióxido de cloro, clorito de sodio, hipoclorito de sodio o derivados. 16 de julio del 2020.

[6] Colegio Oficial de Rarmacéuticos de Madrid (2020). Derivados del cloro: risgo para la salud. Dispnible en: http://www.cofm.es/recursos/doc/portal/2015/10/26/derivados-del-cloro-riesgos-para-la-salud35835.pdf

[7] Chloé Lauvergnier: América Latina: el negocio del dióxido de cloro, el supuesto product “milagroso” contra el COVID-19. France 24. 27/07/2020

[8] Manrique C. Sánchez: El falso medicamento que querían promocionar en Alicante. El Colegio Oficial de Médicos consigue cancelar un acto en la ciiudad. El Pais. 3 de julio de 2020

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