Call: +507 269-9874
Address: Consultorios Médicos Paitilla
blog img

Hace ya un mes escribí un artículo para el público sobre la terapia lumínica o fototerapia, para el manejo de la ictericia neonatal.

 

Confieso que lo hice para informar y educar a padres de familia frente a una situación recurrente donde (1) una persona sin entrenamiento médico utiliza un instrumento óptico para medir la reflectancia del pigmento amarillo de la piel en los niños varones ya en casa, redefinir la hiperbilirrubinemia, referirlo a su médico con la instrucción de que lo readmita al hospital para darle fototerapia, y encontrarse con un galeno complaciente; o, (2) el médico tratante de un recién nacido normal, con ictericia fisiológica o propia, sin factores de riesgo para un exceso de bilirrubina, prefiere utilizar la fototerapia antes de darle de alta de la Sala de Recién Nacidos, para “evitar” una readmisión del niño al hospital, por ictericia; o (3) atento a la literatura respectiva, le preocupa a su médico alguna situación ya descrita de problemas neurológicos aún con modestas elevaciones de la bilirrubina en un niño aparentemente sano.

 

No sobre señalar que en la inmensa, pero inmensa mayoría de las veces, ese niño no necesitaba la fototerapia.

 

Un estudio danés publicado a la comunidad científica hace 2 años[1]reveló que la exposición a fototerapia de niños varones tiene un riesgo aumentado de epilepsia, durante la niñez.

 

Primero advierto, que esto no significa que la fototerapia se deseche como la forma inicial del manejo de la ictericia neonatal con niveles de bilirrubina en la sangre, altos y potencialmente nocivos o tóxicos para el sistema nervioso central.  Lo que indica es que no se use deportiva ni arbitrariamente. Esta decisión es una médica, no de otro tipo.   Si la fototerapia es la forma racional y razonable de tratar el exceso de bilirrubina en el neonato depende de la forma cómo se analizan los diferentes resultados de laboratorio, la edad en horas del bebé cuando se toman las muestras para los estudios, y todas las condiciones del bebé, las presentes alrededor de su nacimiento y, las propias del niño o niña.

 

Un grupo liderado por Thomas B. Newman[2], de Kaiser Permanente Northern California, investigó esa asociación en una cohorte retrospectiva de 499,642 recién nacidos de 35 semanas o más de gestación al nacer, entre 1995-2011 y evaluados por 60 días o más.  Se excluyeron 1,773 niños cuyos valores de bilirrubina excedieron el nivel para recambio de sangre y 1,237 niños diagnosticados con convulsiones antes de los 60 días de vida.  La identificación por trastorno convulsivo fue el diagnóstico una o más veces y, la prescripción de un anti convulsionante una o más veces.

 

Del total de niños después de las exclusiones, 37,683 o un 7.6% recibieron fototerapia.  El tiempo promedio de seguimiento para evaluaciones fue de 8.1 años.  El riesgo acumulativo de epilepsia en el grupo no expuesto a fototerapia fue de 0.76 por 1000 persona-años, y de 1.24 por 1000 persona-años para el grupo de los tratados con fototerapia.  El estudio de Dinamarca dio un riesgo acumulativo de 2.18.  Los varones fueron los de mucho mayor riesgo de tener epilepsia, como se encontró en el estudio danés.  Aproximadamente un 20% de mayor riesgo de epilepsia que las niñas.

 

Estos resultados confirmaron una asociación significativa de fototerapia y epilepsia, aunque inferior a la de aquel estudio.  La preocupación se impone con resultados como estos, que replican los del estudio danés, en el sentido de que utilizar fototerapia para tratar niveles de bilirrubina sérica total inferiores a aquellos que se requerirían para prevenir la exsanguíneo transfusión, podría aumentar los riesgos de toxicidad neurológica.

 

El uso prudente y con criterio estrictamente médico de la fototerapia debe ser elegido sobre cualquier otra situación de comodidad, de temor, o de práctica no médica.   27/9/2018

 

 

[1]Maimburg RD, Olsen J, Sun Y: Neonatal hyperbilirubinemia and the risk of febrile seizures and childhood epilepsy. Epilepsy Res. 2016;124:67-72 pmid:27259071

[2]Newman TB, Wu YW, Kuzniewicz MW, Grimes BA & McCulloch CE: Childhood Seizures After Phototherapy.

Leave a Reply

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.