COVID-19: leve o moderada, aguda o crónica
¿Qué es una enfermedad leve o moderada? Podría decirse que una que no es seria o grave. Sin embargo, hay enfermedades con pocos síntomas, de poca duración en la fase aguda, que no parecen limitar la actividad cotidiana, y, a pesar de ello, no son leves o moderadas, son serias, por lo menos. Una de ellas es el COVID-19.
COVID-19 afecta con seriedad a pacientes jóvenes que no dieron mayores signos de enfermedad y que son individuos sin las llamadas y temidas co-morbilidades, que cambian el panorama y el pronóstico de esta infección. La más evidente de las condiciones es la recientemente reconocida persistencia de síntomas que, en forma recurrente, afectan a algunos pacientes de COVID-19, una vez han sido dados de alta de la enfermedad aguda, que, incluso, no requirió hospitalización. Esto no lo podemos llamar una enfermedad leve o moderada, es una enfermedad seria.
Una encuesta llevada a cabo por Mark W. Tenforde y publicada en MMWR[1]reveló lo siguiente:
Estas son cifras entre pacientes que tuvieron una enfermedad leve que no requirió hospitalización.
Cuando se ha analizado a estos pacientes que no recuperaron la normalidad inmediatamente, las proporciones varían según la edad:
Una interesante asociación, no sospechada y observada en la Universidad de Colorado, en Denver, es que la recuperación tardía o demorada tenía en el fondo, una mayor frecuencia de enfermedad psiquiátrica.
Para quienes se rehúsan a considerar, para muchos efectos, que esta es una enfermedad nueva por conocerse, es necesario reconocer que sus síntomas son muy variables, existe una amplia gama de síntomas y no hay, lo que llamamos, síntomas patognomónicos, es decir, síntomas propios de COVID-19. Tampoco tiene un período de incubación fijo, es decir, no conocemos cuánto tiempo ha transcurrido desde la infección hasta la aparición de la enfermedad. Y, no conocemos la duración de sus síntomas, como tampoco la de los síntomas residuales señalados en esta nota.
Como si esto fuera poco, Angelo Carfi y sus colaboradores[2] han informado que, un 87.4% de 143 pacientes hospitalizados previamente, ha tenido un síntoma persistente, residual por 2 meses o más después de iniciada la enfermedad e, incluso, más de un mes después de la salida hospitalaria. Estos son algunos de sus datos:
Esta serie de Carfi tenía estas características:
Difícil es concebir que exista COVID-19 leve y que el asintomático, no vaya a enfermar más tarde.
[1] Tenforde MW, Kim SS, Lindsell CJ et al: Symptom duration and risk factors for delayed return to usual health among outpatients with COVID-19 in a multistate health care system network – United States. March-June 2020. MMWR Morb Mortal Wkly Rep. 2020;69:993-998
[2] Carfi A, Bernabel R, Landi F: Gemelli Against COVID-19 Post-Acute Care Study Group. Persistent symptoms in patients after acute COVID-19. JAMA. https://jamanetwork.com/journals/jama/fullarticle/2768351.